Los que derriben o alteren gravemente edificios singularmente protegidos por su interés histórico, artístico, cultural o monumental serán castigados con las penas de prisión de seis meses a tres años, multa de doce a veinticuatro meses y, en todo caso, inhabilitación especial para profesión u oficio por tiempo de uno a cinco años.
En cualquier caso, los Jueces o Tribunales, motivadamente, podrán ordenar, a cargo del autor del hecho, la reconstrucción o restauración de la obra, sin perjuicio de las indemnizaciones debidas a terceros de buena fe.
Comentarios
- Bien jurídico protegido:
- Sujeto activo:
- Sujeto pasivo:
- Acción típica:
- Elemento objetivo:
- Elemento subjetivo:
- Tipo de delito:
- Tentativa:
- Omisión:
- Imprudencia:
- Prescripción:
Sentencias